Como ya hemos comentado en anteriores noticias en este blog, los alimentos deshidratados son aquellos comestibles que en su estado natural poseen un alto porcentaje de agua, pero que, a través de métodos naturales o artificiales se les ha extraído en gran parte potenciando así algunas de sus cualidades nutritivas, además de prolongarse su vida útil.
¿Qué ventajas nos ofrecen estos alimentos deshidratados?
- Alto valor nutricional. Con la deshidratación de los alimentos, se produce una pérdida de nutrientes muy inferior a la que provocan otros métodos de conservación.
- Conservación de diversos alimentos. Permite conservar alimentos muy variados, ya sean de alta o baja acidez.
- Sin conservantes. No se requieren para conservar estos alimentos.
- Sabor intenso. En los alimentos deshidratados se produce una concentración de los azúcares naturales presentes, por lo que el sabor se intensifica tras la deshidratación.
- Fácil almacenaje. Al no precisar refrigeración, ni envases especiales, los alimentos deshidratados son muy fáciles de almacenar, y, además, ocupan muy poco espacio, lo cual sin duda para Vegenat S.A. ha sido siempre una gran ventaja,
- Múltiples usos. Su consumo se puede llevar a cabo directamente, como en el caso de muchas frutas como el limón o la naranja deshidratada de Vegenat, o ser usados en multitud de recetas, lo que hace que sea muy demandado entre nuestros clientes.
¿Puedo deshidratar alimentos en casa?
Por supuesto, es una técnica que se lleva haciendo cientos de años para conservar mejor los alimentos. Existen diversos métodos y se emplean diferentes clases de equipos para deshidratar frutas y otros alimentos. A nivel casero podemos hacerlo utilizando:
- Electricidad: con secadores o deshidratadores eléctricos o simplemente utilizando nuestro horno convencional.
- Energía solar: con deshidratadores solares o secado en un horno solar. También podemos utilizar el método de deshidratado más simple y artesanal: secando el producto directamente al sol utilizando una mesa o rejilla y exponiéndolo a los rayos solares.
¿Y qué beneficios tenemos al deshidratar los alimentos en casa?
- Al elegir nosotros los alimentos, conocemos su origen y calidad.
- Al deshidratarlos en casa, conocemos la fecha de procesado. Además, obtenemos productos que no han estado almacenados durante mucho tiempo, ni han estado expuestos a la intemperie.
- La aplicación casera de esta técnica nos permite obtener productos únicos que, en muchas ocasiones, no pueden ser conseguidos en un mercado.
- Nos permite aprovechar la época de abundancia de algunos alimentos, para adquirirlos a bajo precio y deshidratarlos, con ello los tendremos disponibles a lo largo de todo el año, favoreciendo la economía familiar. Además, si tenemos nuestro propio huerto, podemos aprovechar el excedente de frutas y verduras.
¿Tengo que tener algo en cuenta para empezar a deshidratar frutas y verduras en casa?
Lo primero de todo, independientemente del método que vayamos a utilizar, es seleccionar frutas y verduras en su punto óptimo de maduración y eliminar las imperfecciones y partes dañadas. Retiraremos también las semillas y partes más fibrosas.
Por último, las escaldaremos para eliminar cualquier enzima o microorganismo que pueda facilitar su oxidación. Esto es opcional, pero si se hace el resultado será mejor.
Si tengo que elegir un método, ¿cuál sería?
Un deshidratador es la inversión más interesante y eficiente si queréis conservar vuestros propios alimentos o si recolectáis vuestras propias frutas y verduras. Los deshidratadores tienen mucha capacidad de almacenamiento y de una sola vez se puede deshidratar gran cantidad de alimentos. Además, muchos cuentan con temporizador, lo que facilita enormemente la tarea.
Os animamos a que lo intentéis en casa, el proceso es sencillo y muy gratificante y es ideal para acompañar algunos de nuestros platos dándole así un toque especial.